Blog

Back to Blog

Impermeabilización de losas de concreto

En toda vivienda, las zonas interiores deben mantenerse secas. Desde techos, terrazas, tejados hasta sótanos. En la época de lluvias sobre todo, son muy frecuentes las filtraciones por el agua que se acumula en los techos, debido a fallas constructivas por no tener un buen acabado como, por ejemplo, no tener la pendiente e inclinación adecuada para que las aguas drenen con facilidad. Esto ocasiona daños, genera hongos y plagas de insectos.

Cuando las filtraciones del agua son permanentes, se forman ampollas en las pinturas que pueden originar cortocircuitos, deterioro de las fachadas, etc. Es por esto, que la impermeabilización juega un rol muy importante.

Efectos de la humedad

La humedad es uno de los inconvenientes más comunes en una edificación ya sea ésta antigua o nueva. En construcciones actuales éstas fallas se pueden deber a falta de control en la obra y todo redunda en una edificación  con humedades. Si no se cuenta con un buen asesoramiento, no se llega a un diagnóstico acertado, se reparan en sectores con problemas sin tener en cuenta que el proceso que recorre la humedad es variado y no sigue un camino  lógico. En muchos casos las reparaciones se hacen una y otra vez, sin quitar el  problema. La humedad  nos termina ganando, gastando dinero sin resolver el problema, y peor sin encontrar la causa, o se encuentra pero la solución no es correcta.

En uno de los sitios más comunes donde se presentan éste tipo de inconvenientes es en las losas elevadas, sobre todo, en las que se encuentran a la intemperie y en contacto directo con el sol y la lluvia. Las losas tienen una diferencia fundamental con las paredes y es que en ellas, por su posición horizontal, el agua escurre con mayor dificultad, peor aun si no cuentan con una buena pendiente, lo que ocasiona que el agua se encharque.

La durabilidad del concreto está íntimamente relacionada con su compacidad, porosidad y permeabilidad. De ahí que sea tan importante mantener impermeabilizadas las estructuras de concreto, ya que uno de los factores que más afecta el estado del concreto es la filtración del agua.

Para mantener las estructuras aisladas de la acción del agua se recurre al uso de productos impermeabilizantes, que se aplican en el proceso de elaboración del concreto y luego del fraguado y secado. Una opción acertada para corregir éstos problemas es la impermeabilización de la losa ya construida.

Recubrimientos elastométricos

Invertir en materiales de calidad y que brindan una garantía mayor, ayuda a no realizar gastos continuos en mantenimiento. El material a utilizar no solo debe ser un producto que impermeabilice sino un sistema completo que a través de los años genere una buena inversión. Lo más aconsejable para la impermeabilización de losas o cubiertas es el uso de recubrimientos elastoméricos; ya que pueden contraerse y dilatarse con facilidad ante los cambios bruscos de temperatura. Además, éste producto una vez seco forma una película flexible, impermeable y duradera.

El material viene listo para ser aplicado ya sea con brochas o rodillos. La durabilidad del material dependerá del espesor que nosotros obtengamos según el número de capas que apliquemos. Su presentación puede venir en varios colores.

Preparación de la superficie

La superficie debe quedar limpia, libre de contaminantes que afecten la adherencia del material impermeabilizante y debe estar sana, sin huecos ni superficies rugosas. Si la losa es nueva debe esperar 28 días antes de aplicar el revestimiento impermeable.

Luego, se debe revisar la losa para trabajar los detalles como son: las juntas, las grietas, los cambios de dirección como la unión de la losa con el muro y los detalles de las tuberías, desagües, etc.  Los masillados son la manera más común de reparar una losa, pero el uso de la fibra y ligante son imprescindibles para evitar problemas posteriores.

Aplicación

El producto es muy versátil y puede ser aplicado con rodillo de pintar o brochas.  En casos donde las áreas a cubrir son muy extensas se recomienda la utilización de rodillos ya que los rendimientos y la velocidad de aplicación son mejores.

Se aplica una imprimación del producto diluido en agua (1 parte del producto con 1 parte de agua) sobre toda la superficie a tratar, procurando que penetre bien en grietas y fisuras más pequeñas.

Una vez seca la imprimación, aproximadamente después de 1 o 2 horas se puede dar sucesivas capas del producto hasta conseguir el espesor de película deseado. Antes de aplicar otra capa deberá estar totalmente seca la anterior.

Dependiendo de los usos o si la superficie presenta muchos agrietamientos se podrá colocar sobre la primera capa aún fresca aplicado sin diluir una tela de fibra de poliéster recubriéndola con una segunda capa sin diluir. La unión de cada tramo de ésta tela de refuerzo se realizará mediante traslapos de 3 a 5 cm.

Las herramientas y equipos de aplicación deben limpiarse con agua inmediatamente después de haber terminado la aplicación.

Dependiendo del tipo de filtraciones del agua, los sistemas de impermeabilización se pueden instalar al interior o al exterior de la vivienda, evitando este tipo de problemas lo que hacemos es que la propiedad aumente su valor, protege la salud de las personas que habitan en ella. También se evita que los metales se oxiden y la madera se pudra.

Share this post

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Back to Blog